Al ser humano le resulta muy difícil ser objetivo sobre sus propias capacidades. Aquellos que menos saben de una materia sobrevaloran sus conocimientos. Sin embargo, cuanto más se aprende sobre un tema, más dudas surgen. Es lo que se conoce como Efecto Dunning-Kruger, y este artículo te mostrará como intentar escapar de éste y otros sesgos cognitivos.
«El problema en el mundo es que los estúpidos están seguros de todo y los inteligentes llenos de dudas.»
Bertrand Russel
«Cada día sabemos más y entendemos menos.»
Albert Einstein
El camino del aprendizaje y desarrollo del conocimiento es complicado. Y, en ocasiones, eres tú mismo quien te boicoteas. El cerebro humano lleva miles de años evolucionando. Sin embargo, aún cae en atajos y sesgos cognitivos, fruto de un mundo diferente al actual.
EL RAZONAMIENTO HUMANO
La mente humana sigue siendo un misterio. No obstante, investigadores y científicos van descubriendo algunos mecanismos básicos en su funcionamiento. El cerebro intenta ahorrar energía y, cuando puede tomar atajos, lo hace. Es lo que se conoce como heurísticas.
Resulta una manera de ahorrar energía en las centenares de decisiones diarias insustanciales, para gastarla en lo importante. Sin embargo, muchos de esos atajos son inconscientes y se basan en creencias o sensaciones erróneas. Es lo que se denomina sesgos cognitivos.
Los sesgos cognitivos son una interpretación errónea de la información disponible, produciendo un fallo sistemático a la hora de pensar y tomar decisiones. Hay sesgos de muchos tipos: de anclaje, de confirmación, de observación selectiva,…
Los sesgos cognitivos son una interpretación errónea de la información disponible, produciendo un fallo sistemático a la hora de pensar y tomar decisiones.
EXCESO DE CONFIANZA
La experiencia hace que ganes confianza cuanto más practicas una actividad. Seguramente te habrá sucedido con la escalada. Tantas horas realizando el mismo protocolo de ponerte el arnés, comprobar nudos y dispositivo de seguridad puede llevar a un exceso de confianza.
La heurística de disponibilidad hace que tu mente sólo recuerde los eventos más próximos.
Tendemos a examinar la situación acorde a las experiencias previas. La heurística de disponibilidad hace que tu mente sólo recuerde los eventos más próximos. Así, si has pasado los últimos tiempos escalando sin ningún susto, tu cerebro tenderá a reducir el riesgo percibido.
EL EFECTO DUNNING-KRUGER
El efecto Dunning-Kruger es un sesgo cognitivo según el cual, los individuos con escasos conocimientos sufren una ilusoria superioridad, midiendo su habilidad por encima de lo real.
Pero también al contrario; las personas más cualificadas tienden a subestimar su capacidad relativa. No valoran correctamente sus conocimientos y sobrevaloran los de los demás.
CUANTO MENOS SABES, MÁS CONFÍAS
Sucede un efecto curioso con respecto al conocimiento en una materia. Al empezar a indagar sobre conocimientos nuevos, es habitual sobrevalorar lo aprendido. Esto pasa por desconocimiento de la cantidad total de información que puede haber sobre ese tema.
Conoces lo que sabes, pero no puedes saber lo que desconoces.
Por ejemplo, el entrenador que acaba de terminar de estudiar; o, aquel que se lee un libro de nutrición y piensa que tiene la verdad absoluta en ese tema. Es como el que tiene un martillo y piensa que es la herramienta para solucionarlo todo.
También sucede con los nuevos escaladores. Aquellos que empiezan a escalar y no han salido del sector local de iniciación. Pero, incluso, a escaladores experimentados les costaría imaginar una ruta varios grados por encima de su máximo grado intentado.
Una mente ignorante no está vacía. Lamentablemente, al empezar a aprender sobre un nuevo tema el cerebro rellena los huecos con ideas preconcebidas, experiencias, sesgos, suposiciones y corazonadas. Conoces lo que sabes, pero no puedes saber lo que desconoces. Otro ejemplo puede ser aquel habitual de los debates televisivos que una semana te habla sobre virus, a la siguiente de economía y más tarde sobre el cambio climático.
CUANTO MÁS SABES, MÁS DUDAS
El efecto Danning-Kruger combina dos sesgos contrarios. Uno es el que acabas de ver (cuanto menos sabes, más confías). El otro, es el opuesto. Es decir, conforme vas aprendiendo sobre una materia, más dudas sobre cada nuevo conocimiento.
Cuanta más experiencia, más preguntas; y a mayor conocimiento, más interrogantes.
Retomando los ejemplos anteriores. Aquel entrenador, conforme vaya ganando experiencia y conocimientos, se irá dando cuenta de la complejidad de las personas y su entorno. Irá conociendo nuevas herramientas y protocolos, a la vez que los validará con la propia experiencia. Por ese motivo, duda del entrenador que prometa unos resultados concretos («harás octavo grado en un año»), y confía en el que te ofrece un sistema de trabajo coherente.
Lo mismo sucede con un nutricionista versado en papers actuales y con amplia experiencia. Rara vez afirmará rotundamente una información compleja. Cuanto más sabe, más herramientas conoce y más relativiza la validez de cada una.
A más experiencia, más preguntas; y a mayor conocimiento, más interrogantes. Al final, lo que más caracteriza a alguien que sabe sobre un asunto es el uso de la palabra «depende» para relativizar gran cantidad de cuestiones.
ESTUDIOS SOBRE EL EFECTO DUNNING-KRUGER
Los ganadores del premio Nobel, David Dunning y Justin Kruger, fueron los primeros en investigar sobre este sesgo, publicando los resultados en 1999. Estudios posteriores lo han validado de la siguiente manera: realizan un formulario y preguntan a los participantes cómo consideran que les ha ido. Los mejores autovalorados suelen tener la peor nota objetiva. Y viceversa.
Otros sesgo similar es el hecho de que cualquier persona se considera superior a la media, lo que es estadísticamente imposible.
SESGO DE CONFIRMACIÓN
Los humanos necesitan apoyarse en un entorno estable, tanto físico como de conocimientos. Por ese motivo, es habitual ignorar los datos que contradicen tus ideas. El sesgo de confirmación te lleva a favorecer la información que apoya tus ideas, omitiendo aquellas que las ponen en duda.
Es habitual ignorar los datos que contradicen tus ideas.
Recrea la típica discusión entre dos personas con diferentes ideales. Pueden estar horas y horas, y ninguna cambiará de ideas. Lo mismo sucede con la nutrición o el entrenamiento.
Imagina el caso de aquel que ha adoptado una forma de alimentación por unos ideales o en base a alguna información. Sin embargo, no termina de sentirse bien y su cuerpo le manda señales. Pero en vez de hacerle caso, sigue empeñado ya que a tal persona, o en tal canal de youtube, decían que era lo más.
Lo mismo sucede con el entrenamiento. Un escalador que se ha diseñado un plan de entrenamiento según lo que ha ido aprendiendo. O, quizás, adaptando el de su compi del rocódromo o algún influencer de Instagram. Sin embargo, no obtiene resultados. Incluso empieza a sentir dolores y dormir mal. Pero sigue con el plan pensando que si le ha funcionado a tal persona (con su genética, experiencia y circunstancias propias), también debe servirle a él.
SESGO DEL PUNTO CIEGO
Los seres humanos son especialistas en reconocer todos estos sesgos en los demás. Sin embargo, es difícil verlos en sí mismos. Es lo que se conoce como el sesgo del punto ciego. Como cuando miras por el retrovisor y hay una zona que no capta. Allí estás tú.
Éste es el motivo por el que muchos entrenadores trabajan con otros entrenadores. Es difícil ser objetivo con uno mismo. Afortunadamente, cada vez hay más herramientas para conseguir datos objetivos para cuantificar la carga o la fatiga.
NO SUPONGAS. MIDE
Las escalas subjetivas de control de la intensidad son muy útiles y están validadas por muchos papers. Sin embargo, la mayoría de escaladores pecan (pecamos) de entusiastas. Por este motivo, intenta obtener periódicamente la mayor cantidad de datos objetivos.
Utiliza tests que te aporten datos cuantificables y objetivos.
Utiliza tests que te aporten datos cuantificables de fuerza, resistencia, movilidad, técnica, estrategia… Algunos serán sencillos de medir con herramientas como un sensor de fuerza, una tabla multipresas, usando lastre, una polea,… Pero para otras, necesitarás grabarte en vídeo, pedir opiniones externas o usar tests más complejos (como la batería CM-PAT).
Los modelos emergentes de periodización se basan en mediciones concretas. En vez de hacer un plan a largo plazo, lo van realizando acorde al feedback frecuente que van obteniendo.
NO CONFÍES. CUESTIONA
Internet ha vuelto la ciencia muy accesible. Ahora cualquiera puede leer las últimas publicaciones científicas y aplicar los nuevos descubrimientos en su día a día.
Eso está genial. Sin embargo, no debes olvidar que los estudios se realizan en un lugar concreto (muchas veces laboratorio), durante un tiempo determinado (que suele ser breve) y con un grupo de personas que puede, o no, representar a la mayoría (lo que no significa que los resultados sean extrapolables a cada individuo).
Cuestiona la información que te llegue, y contrasta con tu experiencia y con otras fuentes.
Está genial basarse y apoyarse en la ciencia; pero sin llegar al punto de convertirla en demagogia o religión. Serán unos sólidos cimientos en los que apoyarse. Pero, en vez de creer ciegamente, cuestiona todo lo que te llegue, y contrasta con la experiencia y con otras fuentes.
CONCLUSIONES
El efecto Dunning-Kruger muestra la incapacidad que tienen los seres humanos de valorar sus propias capacidades. Así que, si algo debes sacar al respecto es que la duda es tu amiga. Pon todo en entredicho y no te fies de cualquier información. Contrasta y mide siempre que sea posible.
La duda es tu amiga.
Conoces lo que sabes, pero no puedes saber lo que no conoces. Una gran herramienta al adquirir nuevos conocimientos es buscar información contraria e intentar debatirla.
La próxima vez que preguntes a un entrenador que no conoces qué hacer para mejorar tu escalada y te diga, depende, sabrás el motivo. Si en vez de eso, te manda directo (sin previo estudio) a realizar algún protocolo, duda.
Kaja Langer, Christian Simon y Josef Wiemeyer analizaron diversos estudios de escalada en 2022. La conclusión fue que la evidencia científica en e entrenamiento específico de la fuerza está en pañales, y resulta complicado hacer afirmaciones tajantes.
Te habrás dado cuenta que voy actualizando los artículo publicados con regularidad. Sobre todo, para actualizar la información. Pero también debido a que en ese tiempo, yo mismo habré evolucionado y mi propio punto de vista puede haber cambiado.
Otro riesgo del Efecto Dunning-Kruger es al empezar a escalar. En mi caso, a los pocos meses de comenzar fui a escalar con el primo de un amigo, que tenía más experiencia. No sé por qué, pero ese día decidió asegurar con un ocho. Yo no dudé, pues él era «el experto». Como resultado final, visita al hospital y dos clavos de recuerdo que aún siguen en mi tobillo derecho (Es clave aprender a asegurar y saber dinamizar las caídas para hacerlas más seguras).
Así que, si estás empezando a escalar, no vayas a la roca con cualquiera. Aprende para poder cuestionar cualquier decisión. Duda siempre, sin dar nada por hecho. Aunque vayas ganando experiencia, nunca subestimes protocolos sencillos y básicos como el «doble check».
Y tú, ¿tienes algún consejo o anécdota sobre este tema?
Hola Fer, buen artículo, como siempre.
Hace poco lei un libro relacionado: «Porqué creemos en mierdas», de Ramón Nogueras.
Muy interesante.
Una entrevista al autor: https://www.menteyciencia.com/ramon-nogueras-nos-aclara-por-que-creemos-en-mierdas/
Gracias por escribir
Hola Marcos!
Conozco a Ramón Nogueras (no personalmente) y he escuchado alguna entrevista, pero muchas gracias igualmente!
Un saludo, y de nuevo, gracias por tus palabras!
Fantástico artículo. El proceso de este efecto lo llevo experimentado a diario desde que comencé mi tesis doctoral. Todos los artículos de la web me parece que están muy bien escritos, pero este en concreto me ha encantado. No es fácil trasladar a la escalada los conceptos de otras disciplinas de forma tan amena. ¡Muchas gracias!
Hola, Carmen! Muchas gracias y ánimo con la tesis!
Un saludo!