Las prendas de compresión se usan para mejorar el rendimiento deportivo y facilitar la recuperación. Donde más se han estudiado es en las extremidades inferiores, deportes de resistencia y aplicadas en los periodos de recuperación. Los beneficios del aumento del flujo sanguíneo y de la oxigenación muscular parecen prometedores en actividades como la escalada. Por eso, los siguientes estudios han investigado los posibles beneficios del uso de mangas de compresión en los antebrazos para los escaladores.
Las prendas de compresión son prendas elásticas que aplican presión mecánica en la superficie de las zonas corporales, mejorando el retorno venoso a la vez que estabilizan, comprimen y sostienen los tejidos subyacentes. Su uso es común en los deportes para mejorar el rendimiento y facilitar la recuperación.
Sus ventajas se han estudiado en actividades aeróbicas de resistencia, con resultados mixtos. Sin embargo, la investigación en el rendimiento en ejercicios de alta intensidad aún es insuficiente (Ballmann y col., 2019).
En general, escalar consiste en un patrón de movimiento acíclico que requiere contracciones isométricas repetidas de los antebrazos, combinadas con movimientos dinámicos de todo el cuerpo (Baláš y col., 2016). En gran medida, depende de los músculos flexores de los dedos (Watts y col., 1993 ; España-Romero y col., 2009 ; Vigouroux y col., 2015).
Son prendas elásticas que aplican presión mecánica en la superficie de las zonas corporales
La capacidad oxidativa muscular depende de (Consuegra, S. 2020):
- La cantidad de flujo sanguíneo.
- La capacidad del músculo de usar el oxígeno (desoxigenación).
- La capacidad de rellenarse del oxígeno transportado en la sangre (reoxigenación).
Fryer y col. (2015) hallaron una correlación entre el índice de capacidad oxidativa y el nivel en escalada deportiva. Por lo tanto, mejorar su riego sanguíneo y suministro de oxígeno mediante el uso de prendas de compresión podría beneficiar a los escaladores, ¿no?
LA COMPRESIÓN EXTERNA AUMENTA LA PREFUSIÓN DEL ANTEBRAZO
La aplicación de presión tisular, llamada terapia de compresión, es el pilar del tratamiento físico de la insuficiencia venosa de las piernas y de la prevención de la trombosis venosa profunda. Aumenta la tasa de curación de la úlcera venosa y mejora las venas profundas. Sin embargo, se desconoce el impacto de la compresión externa sobre el flujo arterial.
Bochmann y col. (2005) evaluaron la relación entre el aumento de la presión externa inducido por una compresión estándar, y el flujo arterial de entrada y la reserva de flujo arterial del antebrazo. Participaron nueve hombres jóvenes sanos, y se utilizaron medias de compresión de 6 presiones progresivas crecientes.
Primer estudio sobre la compresión en el antebrazo humano.
La manga elástica cubre el antebrazo desde el codo hasta la muñeca. Se supone que la presión ejercida en la superficie se transmite a la profundidad del tejido, llegando a los vasos arteriales. Se trata del primer estudio sistemático realizado en el antebrazo humano.
OBJETIVOS
Los investigadores establecieron los siguientes objetivos:
- Determinar el flujo sanguíneo del antebrazo con 6 mangas de compresión diferentes, que ejercían una presión creciente.
- Precisar el efecto de una presión de compresión externa sobre la reserva de flujo arterial.
- Comprobar la duración del efecto de la compresión sobre el flujo sanguíneo del antebrazo.
- Probar si el aumento del flujo se mantenía durante el ejercicio ligero o el movimiento. Para ello, los sujetos realizaron ejercicios rítmicos de agarre con ambas manos durante unos 70 minutos al 5 – 10% de la contracción voluntaria máxima en un ciclo de trabajo de contracción – relajación de 1:2 segundos.
- Probar el aumento del flujo en condiciones clínicas y medirlo con resonancia magnética.
RESULTADOS
El aumento del flujo se mantuvo durante las 3 horas de aplicación de presión externa y el agarre simultáneo de baja intensidad con la mano. Tras retirar la compresión, el flujo sanguíneo del brazo volvió al valor basal en 1 minuto.
La aplicación de presión externa aumenta el flujo sanguíneo del antebrazo y el flujo máximo hiperémico.
Bochmann y col. (2005)
- Los 6 manguitos aumentaron el flujo. En concreto, la perfusión arterial del antebrazo aumenta más del doble durante la aplicación de compresión externa con una presión entre 13 – 23 mmHg. El motivo parece ser una respuesta autorreguladora tras la disminución del gradiente de presión transmural vascular.
- De forma similar al flujo sanguíneo basal, la reserva de flujo arterial aumentó durante la aplicación de la fuerza de compresión. El flujo máximo tras 5 minutos de oclusión fue casi 5 veces superior al basal.
- El flujo sanguíneo del antebrazo permaneció aumentado durante todo el periodo de aplicación de la presión (3 horas). Tras un aumento inicial superior, la respuesta del flujo se estabilizó al cabo de 60 minutos. Tras retirar los manguitos de compresión, los cambios de flujo fueron en gran medida reversibles al cabo de 1 minuto; y del todo tras 30 min.
- Además, el aumento del flujo sanguíneo se mantuvo durante el ejercicio ligero.
- Tanto la pletismografía de oclusión venosa como la resonancia magnética revelaron aumentos del flujo sanguíneo durante la aplicación de la compresión. La temperatura de la piel de los antebrazos se mantuvo constante.
Los investigadores resumen los resultados en 2 hallazgos principales:
- La aplicación de presión externa aumenta significativamente el flujo sanguíneo del antebrazo.
- La compresión externa aumenta el flujo máximo hiperémico tras 5 minutos de parada circulatoria.
Los autores se preguntan los motivos sobre por qué la compresión estática aumente el flujo sanguíneo del antebrazo, en vez de disminuirlo. Sobre la base de las características de control vascular conocidas, hipotetizan tres mecanismos para explicarlo:
- Respuesta miogénica: El Efecto Bayliss describe cómo los vasos arteriolares se contraen por un aumento del gradiente de presión transmural del vaso y se dilatan en respuesta a una caída del gradiente de presión.
- Comunicación venular – arterial: Debido al mayor grosor de sus paredes, los vasos arteriales son mucho más rígidos que los venosos. Por eso, al aplicar presión externa se puede reducir el lumen (espacio interior) de los vasos venosos, mientras que los segmentos arteriales se dilatan, por la respuesta miogénica mencionada. Al reducirse el ancho, el flujo sanguíneo puede ejercer una mayor tensión de cizallamiento en las paredes de los vasos venosos. Este hecho puede desencadenar la liberación de dilatadores endoteliales en los segmentos venosos. Sin embargo, debido a que el tratamiento con L-NMMA no disminuyó la respuesta hiperémica reactiva tras la isquemia transitoria, parece que este mecanismo no sea el motivo.
- Reflejos vasomotores cutáneos: La aplicación de presión sobre la superficie cutánea puede activar receptores cutáneos no nociceptivos o propioceptores en las capas tisulares subyacentes.
RESPUESTA AGUDA A LA COMPRESIÓN DEL ANTEBRAZO DE LA ACUMULACIÓN DE LACTATO, FRECUENCIA CARDIACA, ESFUERZO PERCIBIDO Y DOLOR MUSCULAR EN ESCALADORES DE ÉLITE
En escalada deportiva, la duración media de los ascensos es entre 2 y 7 minutos. En ese tiempo, los escaladores consumen unos 20 – 25 ml/kg/min de oxígeno (Watts, 2004).
Tras conocer los resultados de Bochmann y col. (2005), parece lógico preguntarse sobre las posibles aplicaciones de las prendas de compresión en los escaladores. Teniendo en cuenta que, en ese caso, usaron un protocolo a la altura del corazón y no durante una escalada intensa con movimientos del brazo por encima de éste.
Pretenden evaluar las respuestas inmediatas a la compresión del antebrazo de la concentración de lactato, la frecuencia cardíaca, el esfuerzo percibido y el dolor muscular durante la escalada exigente en escaladores de élite.
Engel y col. (2018) pretendieron evaluar las respuestas inmediatas a la compresión del antebrazo de la concentración de lactato en sangre, la frecuencia cardíaca, el esfuerzo percibido y el dolor muscular local durante la escalada exigente en escaladores de élite. En el estudio participó Volker Schöffl, figura reconocida en el campo de la investigación de la escalada.
Participaron 7 escaladores de élite (5 mujeres y 2 hombres con nivel 8a – 8c+) de Suiza. Las pruebas consistieron en intervalos 3×3 a la máxima intensidad, en un muro de 8 metros con un desplome de 45º, y distinto cada vez (unos 40 movimientos equivalentes a 7a – 8b de escalada deportiva).
Se les instruyó para que escalaran rápido, en un tiempo máximo de 4 minutos por ascenso. Descansaron durante 4 minutos después de cada bloque y 6 min tras cada serie. Los participantes lo hicieron con mangas en los antebrazos de compresión y sin compresión (placebo).
OBJETIVOS
El objetivo de los investigadores era analizar el impacto de las mangas de compresión del antebrazo en la oxigenación tisular y la perfusión muscular del antebrazo durante la escalada. La herramienta utilizada fue un dispositivo portátil espectroscopio de infrarrojo cercano (NIRS).
También pretendían mediar la variables comentadas:
- Concentración de lactato en sangre.
- Frecuencia cardíaca.
- Esfuerzo percibido (escala de Borg o RPE).
- Dolor muscular local.
que resultan de gran importancia en la escalada.
RESULTADOS
Los investigadores obtuvieron los siguientes resultados:
- La concentración de lactato en sangre no difirió entre el uso de compresión o placebo.
- La percepción del esfuerzo (RPE) fue menor, aunque sin llegar a valores significativos.
- El dolor muscular no varió.
- No pudieron aplicar el NIRS durante la escalada debido al riesgo de lesiones al caer, una sensación de agarre poco natural y una falta general de aceptación entre los escaladores.
Los autores indican que merecería la pena investigar más sobre cómo afecta al esfuerzo percibido, pues una reducción de éste durante los entrenamientos podría afectar en el resto de variables fisiológicas.
Quizás, un efecto placebo «al sentir la prenda» (Kraemer y col., 1998) podría beneficiar la escalada. En otros estudios, los deportistas reportaron una “percepción de mejora” y reducción del dolor muscular al usar prendas de compresión (MacRae y col., 2011. La sensación se atribuyó a la mayor temperatura de la piel y la propiocepción mejorada causada por la compresión (Kraemer y col., 1996; Chatard y col., 2004 ). Algo similar a lo que sucede con el uso del taping (esparadrapo).
El uso de prendas no compresión no afectó al lactato sanguíneo ni el dolor muscular, y de manera poco significativa al la percepción del esfuerzo.
Engel y col. (2018)
EFECTOS DE LAS MANGAS DE COMPRESIÓN DEL ANTEBRAZO SOBRE LA HEMODINÁMICA MUSCULAR Y LOS PARÁMETROS DE FUERZA Y RESISTENCIA EN LA ESCALADA DEPORTIVA
Cierta evidencia respalda la compresión del antebrazo para mejorar la oxigenación del tejido muscular, lo que podría mejorar el rendimiento en escalada deportiva.
Durante la escalada, la fuerza de agarre y la resistencia disminuyen a causa de la isquemia inducida en los músculos flexores de los dedos. La disminución de la oxigenación muscular, genera fatiga muscular y disminución del rendimiento (Watts, 2004; Fryer y col., 2016; Engel y col., 2018).
Pretenden evaluar los efectos de las mangas de compresión del antebrazo sobre la fuerza y la resistencia de los músculos flexores de los dedos en escaladores deportivos.
El índice de capacidad oxidativa de los flexores es otro determinante importante del rendimiento de la escalada en roca (Fryer y col., 2016). Bochmann y col. (2005) demostraron que la compresión externa del antebrazo, inducida por el uso de mangas de compresión, aumenta el flujo sanguíneo arterial local. La pregunta es si esta mejora del flujo sanguíneo podría beneficiar el rendimiento en escalada deportiva.
Faltan pruebas de un efecto de las prendas de compresión sobre la fuerza de prensión manual y el rendimiento deportivo específico de la escalada. De ahí el propósito de Limmer y col. (2022) de evaluar los efectos inmediatos de las mangas de compresión del antebrazo sobre la fuerza y la resistencia de los músculos flexores de los dedos en escaladores deportivos.
Participaron 24 escaladores (mitad hombres y mujeres) que fueron divididos en 3 grupos: con mangas de compresión, con mangas placebo y sin mangas. Se realizaron 3 pruebas de rendimiento:
- Mediciones intermitentes de fuerza y resistencia del agarre.
- Suspensiones de dedos.
- Series de escalada.
OBJETIVOS
Los investigadores evaluaron la oxigenación muscular durante las mediciones de agarre mediante espectroscopía de infrarrojo cercano (NIRS). Es decir, el protocolo que no consiguieron aplicar en el estudio de Engel y col. (2018). También midieron el nivel máximo de lactato en sangre, la tasa de esfuerzo percibido y el dolor muscular en el antebrazo tras las pruebas de series de escalada.
Se evaluaron:
- La fuerza y resistencia del agarre manual: Los participantes realizaron 10 tirones de 3 segundos intercalados con reposos de la misma duración (3 segundos). Se midieron la fuerza máxima, la fuerza mínima y el índice de fatiga (= [(F max –F min )/F max ] × 100).
- Suspensiones de dedos para medir la resistencia. Continuas, realizadas hasta el fallo, en 4cm y con agarre en extensión.
- Series de escalada: Consistió en escalar una ruta predefinida en top-rope tantas veces como pudieran. Se trataba de una vía de 15 metros de dificultad homogénea. Para estandarizar y reducir las estrategias de recuperación durante la escalada, los escaladores no podían untar en magnesio ni agitar los brazos.
- Espectroscopia de infrarrojo cercano (NIRS): se evaluó durante las pruebas de resistencia y fuerza del agarre, y durante las suspensiones. Se eligió el músculo flexor digitorum profundus por ser el más importante para el rendimiento de la escalada deportiva (Michailov, 2014 ; Fryer y col., 2015).
RESULTADOS
Los resultados muestran que las mangas de compresión no mejoraron la fuerza ni la resistencia del agarre. Tampoco hubieron mejoras en las series de escalada, en las respuestas fisiológicas ni en la percepción del esfuerzo (RPE).
Sin embargo, sí detectaron cambios en las respuestas hemodinámicas. Se registraron en el oxígeno (hemo) y la saturación de oxígeno tisular (StO 2) en las fases de desoxigenación y reoxigenación durante las pruebas de resistencia y fuerza del agarre.
Aún así, los cambios hemodinámicos parecen ser insuficientes para influir en el rendimiento de la escalada deportiva.
Aunque hubieron cambios hemodinámicos, no influyeron en la escalada deportiva. Tampoco mejoraron la fuerza ni la resistencia del agarre, no hubieron mejoras en las series de escalada, en las respuestas fisiológicas ni en la percepción del esfuerzo (RPE).
Limmer y col. (2022)
CONCLUSIONES
Las mangas de compresión aumentan la saturación de oxígeno de los tejidos en reposo y durante la recuperación del ejercicio aeróbico, sin alterar el tiempo hasta la fatiga (Ménétrier y col., 2011).
La escalada depende en gran parte del rendimiento en la alta intensidad, y de la fuerza y resistencia intermitentes de los músculos flexores de los dedos. Aún así, ni Engel y col. (2018) ni Limmer y col. (2022) han encontrado beneficios de usar mangas de compresión del antebrazo en el rendimiento de la escalada.
No se han encontrado beneficios de usar mangas de compresión del antebrazo en el rendimiento de la escalada.
Incluso, un metanálisis reciente ha concluido que el uso de prendas de compresión en las extremidades inferiores tiene efectos insignificantes o nulos sobre el rendimiento y las respuestas fisiológicas después del ejercicio de alta intensidad (Da Silva y col., 2018).
Por lo tanto, los hallazgos de las investigaciones no respaldan los beneficios sobre la fuerza y la resistencia muscular que afirman los fabricantes de las mangas de compresión del antebrazo, y en los que confían los deportistas. Aún así, los resultados sugieren que las mangas de compresión del antebrazo pueden mejorar el flujo sanguíneo muscular y la saturación del tejido.
Además, un posible efecto placebo por el simple hecho de «sentir que llevas la prenda» podría beneficiar el rendimiento (como sucede con el taping). Y si ese fuera un mecanismo para mejorar el rendimiento, bienvenido sea. Y espero que si es tu caso, la lectura de este estudio no lo eche por tierra…
Donde sí que muestran los mayores beneficios durante los períodos de recuperación. Y recuperar mejor entre sesiones puede permitirte aumentar el volumen y la calidad, mejorando tu rendimiento.
Espero que este artículo responda las dudas que me habéis transmitido algunos lectores. Como siempre, agradeceré si compartes tus experiencias en los comentarios.
Y recuerda que me tienes disponible para entrenar, realizar una evaluación técnica y del perfil fisiológico, o formarte y solucionar tus dudas.
REFERENCIAS
- Bochmann, Rolf P et al. “External compression increases forearm perfusion.” Journal of applied physiology (Bethesda, Md. : 1985) vol. 99,6 (2005): 2337-44. doi:10.1152/japplphysiol.00965.2004 (link).
- Engel, Florian Azad, et al. «Acute responses to forearm compression of blood lactate accumulation, heart rate, perceived exertion, and muscle pain in elite climbers.» Frontiers in physiology (2018): 605 (link).
- Limmer, Mirjam et al. “Effects of Forearm Compression Sleeves on Muscle Hemodynamics and Muscular Strength and Endurance Parameters in Sports Climbing: A Randomized, Controlled Crossover Trial.” Frontiers in physiology vol. 13 888860. 3 Jun. 2022, doi:10.3389/fphys.2022.888860 (link).
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